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Quiropráctica y Embarazo

El embarazo, es claramente un momento de grandes cambios tanto físicos como químicos en el cuerpo de una mujer.

Esto no solo influye a nivel del aumento de peso o de la alteración de su campo de gravedad, sino que su columna se vuelve más flexible.

 

Un seguimiento y control de esta posible tensión en los ligamentos propicia a menudo el cambio de posicionamiento del feto antes del parto, contribuyen a facilitar un parto natural.

 

Quiropráctica y Embarazo

La quiropráctica nos ayuda a que el sistema reproductor, así como los otros sistemas del cuerpo, reciban, sin interferencias, el flujo de transmisión proveniente del sistema nervioso a través de la columna vertebral.

Con esto, se consigue una columna libre de subluxaciones y un sistema nervioso sin interferencias.

Durante el embarazo es muy común una subluxación causada por estrés tanto mecánico, como químico o emocional.

Sea cual fuera la causa, el resultado es una interferencia en la transmisión de impulsos nerviosos que puede afectar negativamente tanto a la madre como al desarrollo del feto.

Las ciáticas o lumbalgias tan comunes en este período, provocadas en gran medida por los mencionados cambios de gravedad, de posicionamiento y flexión vertebral, suponen una molestia para la actividad diaria así como la pesadez de piernas y el malestar general gastrointestinal.

La Quiropráctica, es una manera natural de ayudar al cuerpo a reducir al máximo las manifestaciones de esta etapa, con objetivo de hacer estos meses más llevaderos, pudiendo continuar con las rutinas de actividad normales.

Ajustando la columna vertebral de la embarazada, se reducen las subluxaciones vertebrales o desplazamientos leves de las vértebras que alteran la función de los nervios, permitiendo así la auto regulación del organismo para que la mujer pueda continuar activa al máximo durante su embarazo.

El quiropráctico seguirá un control para asegurarse de que tanto la pelvis, que se ve especialmente afectada en todo el proceso, como las vértebras, se encuentren en equilibrio y funcionen de manera unificada.

Las técnicas empleadas y el hecho de prescindir de medicación, hacen que la Quiropráctica sea segura, tanto para la madre como para el feto.

Una disfunción en la zona lumbar y/o pélvica puede crear tensión en los ligamentos pélvicos, los que sostienen el útero y consecuentemente influir en un mal posicionamiento del bebé, ocasionando problemas que pueden desembocar en cesárea.

 

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https://www.youtube.com/c/ChiropracticDrMarcBony

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