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Quiropráctica y Sinusitis
Cuando la mucosidad llena en exceso las cavidades aéreas aparece lo que conocemos como sinusitis.
La sinusitis es algo bastante común. Aparece normalmente cuando tenemos un resfriado y desaparece al mismo tiempo. Pero si el drenaje está bloqueado, la presión aumenta y puede causar dolor, malestar general, dolor de cabeza e inflamación alrededor de los ojos y oídos. Dolor de mandíbula, escalofríos, fiebre, mareo, pérdida del apetito, fotofobia, mal aliento, náuseas e incluso depresión.
Causas de la sinusitis
Todo lo que irrite a las sensibles membranas mucosas puede ser un factor que contribuya a la aparición de sinusitis; el polvo, moho, polen, humos, virus y bacterias, etc.
Los que padecen de alergia suelen tener síntomas de sinusitis debido a que muchos alérgenos irritan las cavidades nasales. Otras causas menos comunes de sinusitis son el crecimiento óseo, pólipos nasales, pared nasal desviada, lesiones faciales, tumores o enfermedades de los dientes superiores.
Las bacterias y los virus sólo crecen cuando las condiciones son las idóneas. Son el resultado de una disfunción corporal.
El tratamiento médico prototipo para la sinusitis y rinitis suele ser el drenaje y tratamiento con descongestionantes, antibióticos y antihistamínicos.
Las farmacias están repletas de todo tipo de remedios contra la sinusitis. Este tratamiento es controvertido ya que los medicamentos pueden aliviar la congestión nasal, pero tienen efectos limitados en los senos nasales o paranasales y pueden causar efectos secundarios.
Quiropráctica y Sinusitis
La quiropráctica, al aliviar la tensión ejercida en el sistema nervioso y en la estructura del cuerpo, ayuda a que el cuerpo funcione más eficazmente. Además, la atención quiropráctica, pude reforzar la disposición para que los huesos del cráneo se muevan con más libertad y “respiren”, permitiendo que los fluidos del cuerpo drenen sin interferencias.
Los quiroprácticos llevan décadas observando los beneficiosos efectos del tratamiento de la columna vertebral obrados en el sistema nervioso, inmunitario y respiratorio.