Me llamo Herminia Joan Borras y acudo habitualmente a la consulta del Dr. Bony, desde hace dos años.
Normalmente acudo a la consulta con mi mascota, un Chihuahua llamado Milo, de año y medio.
Hace un año Milú y yo acudimos a la consulta. El Dr. Marc observó que Milú cojeaba de una de las patas traseras, y me preguntó que le había ocurrido. Le explique que hacía unos días la llevé al veterinario por ese motivo. El diagnóstico resultó que debía tomar unos antinflamatorios durante ocho días, volver a su consulta y tener una cita con el cirujano, pues aconsejaba que el animalito debiera ser sometido a una operación.
El Dr.Marc le ajustó en ese momento que yo le contaba lo sucedido.
A los pocos días volvi a mi cita para ajustarme, y traje como siempre a Milú a la consulta. Apenas cojeaba y su mejora desde el primer ajuste era evidente.
El Dr. Marc le ajustó dos veces más, y el perro se recuperó totalmente.
Yo me senti más tranquila con ello que volviendo al veterinario y sometiendo a mi pequeña mascota a una operación que tal vez no la hubiera ayudado a recuperarse tan rápidamente.